La liposucción o la lipoescultura es una operación quirúrgica que tiene como objetivo principal eliminar los depósitos de grasa localizadas en determinadas zonas del cuerpo. Las partes más comunes para realizarte este tipo de intervención son el abdomen, los muslos, el cuello, los brazos, caderas… pero todo depende de cada paciente y de sus necesidades, porque también se puede hacer liposucciones de rodillas y tobillos, entre otras zonas.
¿En qué consiste esta operación de cirugía estética?
Se elimina la grasa localizada mediante la introducción de una cánula que está conectada a una máquina de vacío. No es un método sustitutivo para perder peso, sino que sirve para moldear determinadas zonas del cuerpo que no se pueden corregir de forma natural.
¿Quién es el candidato ideal para la liposucción?
El paciente ideal para una liposucción es la persona que está un su peso normal pero que sigue acumulando grasa considerable en determinadas áreas de su cuerpo. No obstante, previamente se le realizará al paciente un estudio general para comprobar que su estado de salud es correcto y que no tiene ningún riesgo someterse a esta operación quirúrgica.
¿Cómo se lleva a cabo la cirugía?
En primer lugar, se realizan varias incisiones de pequeño tamaño, entre 5 y 10 mm aproximadamente, para introducir las cánulas con las que se va a aspirar la grasa. A través de unas sondas muy pequeñas se aplicarán ondas ultrasónicas que transformarán la grasa hasta que adquiera el estado de emulsión. El número de incisiones varía según las áreas a succionar y las preferencias del cirujano. Las cicatrices apenas son apreciables, lo que es fantástico. El tiempo de este tipo de intervenciones varía en función de la zona.
¿Cómo es el Postoperatorio?
Es tan importante el postoperatorio y las semanas de después de la operación como la intervención quirúrgica en sí, por eso debemos darle la misma o incluso más importancia.
? Para disminuir el dolor los primeros días, el paciente se podrá tomar los medicamentos que le receten,siempre siguiendo las indicaciones de los profesionales.
? El paciente deberá llevar durante aproximadamente 3 o 4 semanas prendas de compresión para garantizar el éxito de su operación y evitar la acumulación de líquidos. El cirujano junto con el paciente elegirá la prenda postoperatoria que sea más recomendable.
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